¿Qué es el aire?,
mostrándome las manos
como si fueran un cuenco.
No sé qué decirle,
ni tengo palabras para describirlo.
Sospecho que es el aliento de Dios,
que como suave seda
nos envuelve,
para que lo percibamos a Él;
por ello es lo mismo
en todos los lugares de la tierra
y facilita la vida a todo ser que vive.
Es como un mar, en el que flotan
las nubes como algodón
y las aves encuentran el camino
para regresar a sus casas
Te aspiraré pensando
en los hermosos lugares
que antes recorriste:
los árboles y plantas
que te respiraron,
limpiando la herrumbre
que te transfundieron
otras respiraciones,
las notas musicales
que hicieron de ti
camino para la belleza.
Percibo en ti los aromas
que respirara en mi niñez,
la suavidad de las manos,
que en otro tiempos me acariciaran,
los susurros de quienes
me despertaran a amar.
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